El esguince de tobillo es una lesión que se caracteriza por un sobreestiramiento o rotura de alguno de los ligamentos del tobillo, siendo éstos unas bandas de tejido conectivo que unen diferentes huesos dándoles una gran estabilidad a la articulación en conjunto. Su función principal es que el movimiento en las articulaciones sea el correcto, y no se exceda en cuánto a amplitud. La patología más común en el tobillo es la lesión del ligamento lateral externo, más concretamente, el peroneo-astragalino anterior.
Esta lesión se puede producir de numerosas formas, pero la más común es una simple torcedura del pie o un mal apoyo tras un salto. Del mismo modo, los ligamentos del tobillo se pueden lesionar tras una caída o en el ámbito deportivo tras un golpe, siendo esto último un factor de riesgo en esta lesión.
Otros factores que pueden afectar directamente a estos ligamentos y a la propia estabilidad de la articulación pueden ser: superficies irregulares, mal acondicionamiento físico y lesiones previas en la misma zona, aunque se hayan recuperado completamente y sin ninguna secuela.
¿Qué notamos ante una lesión de este tipo?
Lo que va a notar una persona que se ha hecho un esguince puede ser muy variado según la gravedad de la lesión, ya que en algunos casos se puede andar (sin ningún tipo de cojera) con un ligero dolor, mientras que en otros el apoyo del pie en el suelo va a ser imposible, teniendo que usar un apoyo externo como puede ser una muleta.
Los síntomas principales, variando el grado de intensidad son los siguientes:
- Dolor en la zona del tobillo, tanto en reposo, como al andar o simplemente por apoyar el pie en el suelo.
- Hinchazón y posibles hematomas.
- Limitación en la movilidad de la articulación.
¿Cómo podemos recuperarnos de una lesión así?
Para todo ello, y en función de la gravedad de la lesión se establece un tratamiento de fisioterapia que consiste en lo siguiente:
- Indiba Activ para combatir la inflamación en la primera fase, así como una reparación óptima del ligamento.
- Terapia manual para ganar movilidad y aliviar síntomas relacionados con posibles contracturas que se han podido producir tras la lesión.
- Ejercicios de fortalecimiento y de propiocepción (equilibrio) para evitar recidivas.
El esguince de tobillo es una de las lesiones más comunes, y en nuestro centro de fisioterapia Guadalajara Fisiofine contamos con los mejores expertos en este ámbito. Especialistas en tratamiento rápido y eficaz. Si es tu caso no dudes en ponerte en contacto con nosotros, y uno de nuestros profesionales te asesorará al instante.