Es una técnica de tratamiento no invasiva que consiste en el paso de corriente (alta frecuencia) al interior del organismo. El paso de la corriente se lleva a cabo gracias a un circuito cerrado formado por un electrodo y una placa.
Este paso de corriente se desplaza por los diferentes tejidos del cuerpo humano, reaccionando con éstos y produciendo una serie de efectos fisiológicos endógenos. En función del tipo de tejido (óseo, muscular, acuoso…) el paso de corriente puede ser más intenso (se concentra más en la zona de dicho tejido).
Efectos que produce la diatermia
Los dos principales efectos que produce la diatermia son:
- Subtérmicos: lo que se consigue es una simple estimulación eléctrica de las células de los tejidos (aumentando el metabolismo), independientemente del tipo de tejido que sea.
- Térmicos: este efecto se produce gracias al efecto Joule que consigue que el paso de la corriente eléctrica a través de los tejidos se transforme en calor. Debido a esto, en el organismo se pueden producir tres reacciones como puede ser una simple bioestimulación, una vascularización o una hiperactivación.
Beneficios de la diatermia
En consecuencia, estos efectos producen una serie de beneficios en el cuerpo humano como son los siguientes:
- Mejora la eliminación de la inflamación producida en ciertas patologías y por lo tanto el dolor en esos casos.
- Estimula y acelera los procesos de cicatrización y reparación de los tejidos.
- Favorece la relajación muscular.
Como cualquier otra técnica, presenta una serie de contraindicaciones absolutas que son las siguientes: mujeres embarazadas, implantes metálicos (marcapasos) y tromboflebitis.
Patologías que se pueden tratar con la diatermia
Una vez explicado cómo funciona este tipo de corriente, se exponen a continuación diversas patologías que pueden beneficiarse en gran medida de su uso:
- Cualquier tipo y estado de las tendinopatías o esguinces.
- Procesos degenerativos (artrosis, artritis…).
- Problemas musculares o roturas de fibras.
- Cicatrices.
- Edemas postraumáticos, postquirúrgicos y óseos.
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